Primero, este es un tipo de acero que se obtiene a partir de materiales de diseño de acero, como chatarra, piezas metálicas viejas, electrodomésticos desechados, automóviles en desuso y otros productos de acero al final de su vida útil.
En lugar de utilizar mineral de hierro virgen, el proceso de reciclaje de acero implica fundir y refinar estos materiales recuperados para producir nuevo acero. El acero reciclado es un componente clave de la industria del reciclaje y juega un papel esencial en la promoción de prácticas más sostenibles en la fabricación y la construcción. Su uso contribuye tanto a la conservación de recursos naturales como a la reducción de la huella ambiental, lo que lo convierte en una opción valiosa desde el punto de vista económico y ambiental y es aquí donde el acero reciclado posee su importancia.
Una de estas es la sustentabilidad ecológica, ya que, al reciclar el acero, se disminuyen considerablemente los efectos ambientales relacionados con la obtención de mineral de hierro y la fabricación de acero a partir de recursos naturales vírgenes. Esto incluye la conservación de recursos naturales y la disminución de la emisión de gases de efecto invernadero, dando una gran reducción de la demanda de los recursos naturales, pues reduce la necesidad de extraer mineral de hierro y otros recursos naturales, lo que ayuda a conservar estos recursos limitados y minimizar el impacto ambiental de la minería y con esto dando un menor consumo de energía, ya que la producción de acero a partir de chatarra reciclada generalmente requiere menos energía en comparación con la producción a partir de mineral de hierro virgen, al reciclar acero, se evita que toneladas de desechos de acero terminen en vertederos, lo que reduce la cantidad de residuos sólidos y la contaminación ambiental.
Esto conduce a una menor emisión de gases de efecto invernadero y una huella de carbono reducida.
Además de la reducción en el uso del agua, ya que la producción de acero a partir de chatarra reciclada utiliza menos agua en comparación con la producción a partir de materias primas vírgenes, lo que es especialmente importante en regiones con escasez de agua. Con esto así dando un cumplimiento a las regulaciones ambientales, las cuales son obligatorias en muchas regiones, pues el uso de materiales reciclados y el cuidado del agua es algo que está respaldado por regulaciones y estándares ambientales que fomentan prácticas sostenibles.
En un tema más cuantitativo, el acero reciclado es un claro apoyo a una economía circular, debido a que el reciclaje de acero es un ejemplo clave de una buena planeación hacia una economía circular, una planeación donde los productos al final de su vida útil se reintroducen en la cadena de suministro, reduciendo así la necesidad de recursos frescos y minimizando los residuos; dando menores costos de producción volviéndose más rentable que la producción a partir de materias primas vírgenes, ya que se ahorran costos de extracción y procesamiento.
Ofreciendo así una calidad de producto bastante buena, pues el acero reciclado es de alta calidad y cumple con los mismos estándares que el acero producido a partir de materias primas
vírgenes, lo que lo hace adecuado para diversas aplicaciones industriales y de construcción.
Para finalizar, el uso de acero reciclado no solo beneficia al medio ambiente al reducir la demanda de recursos naturales y la contaminación, sino que también puede ser económicamente ventajoso al reducir los costos de producción. Esta es una de las muchas formas en que serviacero ORBIS está avanzando hacia una producción más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
